martes, 11 de noviembre de 2008

Rutina

Tus besos no serán suficientes para acortar la distancia. Siento que en cierta forma, hay como un océano que nos separa, y que hace que por más que grites, tu vos no llegue a mis oídos. Un océano en verdad nos separa, y la sal del mar hace que no llegue a mí la posibilidad de la sal en tus mejillas. Me es indiferente que observemos la misma luna.


Y cuando te veo, ya no brillan como antes tus ojos, aquellos pequeños pozos del alma que me ahogaban en ti cuando me sumergía. Y cuando te veo, mis labios ya no se entreabren como buscando un beso.


Y me decis:


“te quiero”


Respondo:


“y yo a vos”

No hay comentarios:

Publicar un comentario