martes, 30 de diciembre de 2008

A vos

Yo te quiero a vos
Y solo a vos
Soy persona de una sola persona
Una vez que soy feliz con alguien, no ando viendo a nadie más.
Es así de simple, nada complejo.
Y te quiero a vos y solamente a vos.
Vos me erizás la piel.
me apresurás la respiración
mi corazón no es el mismo a tu alrededor.

Te quiero a vos
Todavía aún, te quiero a vos.
Sueño con vos.
Vos sos el único
Todavía sos él.
Son tus manos que quiero que me recorran
quiero que me conozcas y conocerte a vos
de maneras que todavía no nos hemos conocido.
Quiero que nos besemos donde antes no nos hemos besado.
Vos sos él.
La persona que me da esa confianza,
con el que estar desnudo no sería relevante,
no sería intimidante.
Deseo todavía tu olor sobre mi cuerpo,
que nuestros cuerpos choquen,
que el sudor sea lo que menos importe.

Te quiero a vos.
¿A quién le importan los demás?
No importa que hagan,
nunca serán vos.
Se siente la diferencia.
No hay esa seguridad,
no hay esa confianza,
me hace falta la pasión,
me hacen falta tus mordizcos,
me hacen falta nuestras narices rozándose.

En esas noches de frío,
te quiero a vos y solo a vos.
Quiero que nos unamos,
quiero pasarlo con vos,
quiero violencia y amor,
todo en un mismo acto,
y que sea con vos.

viernes, 26 de diciembre de 2008

Ganas de qué?

Lamernos las labios, beberme la sal de tu pecho.
Tener vacaciones de mi misma con vos.
Reírme de mis miedos hasta que me duela el estómago
Retorcerme hasta que me duela la espalda
Ver esa loca película toda la noche, una y otra vez.
Besar cada demonio que querás exorcizar
Que me mirés a los ojos mientras logre mantenerlos abiertos
Cambiar esas malditas lágrimas por esas benditas
Frotarse hasta desgastarse
Morderte hasta saciarme
Soñar con vos, despiertos los dos
Dormir sólo cuando sea inevitable

De eso tengo ganas

sábado, 13 de diciembre de 2008

Abracemos al odio

¿Alguna vez han odiado apasionadamente? Es un sentimiento maravilloso que nos permite hacer y decir cosas que normalmente no podríamos lograr.

Sentir el odio consumir poco a poco nuestra humanidad es una de las pocas experiencias que todos deben vivir al menos una vez en la vida. Un profundo rencor, una obsesión macabra, un deseo de venganza, una desesperación violenta, todas estas emociones son las que nos definen como personas.

Si se quiere conocer a una persona, hay que observarla en un momento de locura psicótica, donde nos deshacemos de nuestras ataduras sociales y mostramos al mundo como verdaderamente somos.

Además, lo más bello del odio es que es el único sentimiento único y característico del ser humano. Los animales sienten miedo, pasión, lujuria, amor, aburrimiento y muchos otros sentimientos que comparten con nosotros, pero nunca sienten odio.

No olvidemos las propiedades sociales del odio. Marx dijo que la historia de la humanidad es una historia de lucha de clases, pero obvio el hecho de que esta lucha se da gracias al odio entre seres humanos. El odio tiene la capacidad de crear revoluciones, reformas, guerras, genocidios, caos, muerte y destrucción, cosa que ningún otro sentimiento humano puede emular.

El odio enciende nuestras almas, acelera nuestros corazones, apasiona nuestra rutina y da sentido a nuestras vidas. Una vida sin odio sería como una cerveza sin alcohol, puede que sepa bien, pero no va a llegar a nada.

Por estas y muchas más razones extiendo la invitación a odiar más y odiar mejor, a detestar a quienes nos rodean y repudiar a quienes están lejos, a sonreír menos y perdernos en la locura, a olvidar a nuestros seres queridos y a alejar a quienes nos alegran. Evitemos los abrazos y los placeres de la vida, que nos alejan del verdadero camino, de la oscuridad y de las maravillas que nos ofrece el profundo y perenne odio.

viernes, 12 de diciembre de 2008

jueves, 4 de diciembre de 2008

La proxima vez...

Pero tranquila… esta noche acudirá a visitarme el olvido, y obrara su necromancia sobre mí. Me secará el corazón; se arreglará el problema.


La próxima vez, exijo al karma que me permita ser el verdugo.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Tiempo

Ya van siendo varios años
De una huida, de un engaño
Y mientras pasan los momentos
La vida se viene siempre al suelo.

Deseo juntar esos extremos,
Y poner en mi cuello un talismán de fuego
Juntando mis manos y rezando al viento
Que todo el daño se consuma en el tiempo.

Veo atrás y veo desprecio,
Veo el futuro y se encuentra incierto,
Veo el presente y no sé si siento
Pero es ahora cuando estoy viviendo.

Y todavía, aún recuerdo
Los estigmas que en mis huesos dejo el hielo
Que con locura de besos y aliento
Trate de borrar sin remordimiento.

Entre más lo pienso, más lo creo
Que todo va a desencadenar un milagro,
A pesar de mi credo
Para poder naufragar sin miedo,
Oyendo el rumor del cielo
Que ya gris se ha puesto,
Y que sólo los rayos iluminan de nuevo.

Es tiempo lo que quiero,
Revertirlo y rehacerlo
Según mis movimientos,
Sean firmes o siniestros
O tal vez débiles y contentos.

Es tiempo lo que hace falta
Para acabar con las falsas amenazas,
De una vida perfecta,
Que se desvanece en la nada.

Es el eclipse el que predice,
Que después de varios años
Todo desaparece cuando la muerte llega
Sin poder divisar donde dejaste tus huellas.